Buenos días.
A tan solo 34 kilómetros al sur de Albacete se encuentra Peñas de San Pedro, un precioso pueblo situado en la frontera de La Mancha con la Sierra de Alcaraz. Si algo llama la atención de este pueblo, sin duda alguna, es la espectacular mole de piedra que domina el.paisaje desde kilómetros y kilómetros a la redonda, y en cuya falda se encuentra.
Revisando un poquito su historia, este castillo tiene su origen con el reino de Taifas de Murcia, pues la frontera del mismo tenía en este punto uno de sus bastiones de defensa: domina el llano, domina la sierra y además, es inexpugnable, no se puede pedir más a un castillo.
Así pues, este castillo fue objeto de deseo por unos y otros durante siglos, lo cual hizo que pasara a ser una fortaleza con una población notable, donde no sólo vivían soldados, también lo hacían civiles y religiosos.
Está claro que la pequeña ciudad necesitaba un suministro de agua continuo, de ahí que llame la atención la serie de cisternas construidas para poder recoger el agua de la lluvia, y que en la actualidad aún podemos visitar.
Pasaron los siglos y el castillo se fue modernizando y ampliando con los tiempos, de modo que en el siglo XIX contaba con varios puestos de artillería y por supuesto, su correspondiente polvorín...y fue aquí, queridos amigos, cuando la historia de nuestro castillo tiene su fin, pues en 1810 cayó un rayo en dicho polvorín, causando tal.destrozo que arruinó todas y cada una de las edificaciones que allí había.
En la actualidad, si vistamos el castillo podemos ver la muralla, de una longitud superior a los mil metros (en parte original, en parte reconstruida), un puesto de artillería, los aljibes, dos pequeños muros aún en pie de la iglesia y algún otro resto más...todo lo demás desapareció por completo en la explosión, ¡una pena!
Lo cierto es que el atractivo de la excursión no es sólo la visita a los restos, sino que también las increibles panorámicas sobre los llanos de La Mancha que nos regala el lugar.
El acceso es sencillo y ya sabemos como funciona: una cuesta empinada de unos cientos de metros, eso sí, por un camino restaurado, lo que hace que en pocos minutos podamos llegar a la cima.
No quiero aburriros con la historia del castillo, con las piedras que quedan por allí o con la anchura de los lienzos de la muralla; lo que sí quiero es animar desde aquí a todo el mundo que desee visitarlo a que lo haga, no van a quedar defraudados.
Aquí os dejo un mapa de situación, y si pinchas en este enlace.podrás acceder a todas las fotos.
Un saludo...Edu
Pues fijate tú, que yo pensaba que las Peñas de San Pedro, tan sólo tenían buenos embutidos y buenos profesionales para poner las encimeras en las cocinas...., jajajajajaj, fuera bromas...., por supuesto, que es un pueblo a tener en cuento no ya por lo bonito y empinado que es, no digo nada de la mole que vigila el pueblo, sino por, como bien has apuntado, la historia de su catillo y de su muralla.
ResponderEliminarBuenas fotos y muy buenos modelos, jajaja.
Un saludo.
Amigo mío, gracias por lo de los modelos...jajajja
EliminarPUes mira que está cerca y lo poco visitado que es. Entiendo que no hay un edificio en sí que merezca la pena, pero bueno, simplemente contemplar las vistas desde allí arriba ya merecen la pena. Además, recorrer la muralla ya da un añadido a la visita.
En fin, que a ver si la gente se anima más, que merece la pena.
Nos vemos en ruta.
UN abrazo....Edu