Buenos días.
Son muchos los rincones de la sierra de Alcaraz, y en esta ocasión hemos visitado (de nuevo) la zona que partiendo de Vianos, se adentra hasta el pico de la Almenara. Es un sitio espectacular, llenos de pequeños cañones, con arroyo en cada uno de ellos, y que siempre permiten realizar una ruta especialmente vistosa.
Además, en esta ocasión nos hemos ido para aquellos montes nada menos que Berme y éste que suscribe, toda una garantía de que la ruta iba a ser buena, y lo digo por mi compañero, claro está...jejeje. Lo cierto, es que nos habíamos prometido una ruta serrana desde hace tiempo, y ya iba siendo hora de que nos dieramos el gustazo. Esta claro que ese día uno siempre tiene que madrugar bastante más, pero al fin y al cabo y echando mano del refranero: "palos a gusto..."
Así que, con estos mimbres vamos a empezar a situar el origen de la ruta, que no es otro que el pueblo de Vianos, un pequeño y delicioso lugar situado en la zona oeste de la sierra de Alcaraz, y que se asoma a un impresionante cortado en su cara norte. Si tenemos tiempo merece la pena dar un pequeño paseo por sus calles y, como no, asomarnos por alguno de los balcones del cortado.
Tomamos la carretera que va hacia Paterna de Madera y en breve nos desviaremos por un camino que parte a la derecha, de tierra pero en perfecto estado (como el resto de la ruta) y que en breve se irá adentrando en terrenos mucho más accidentados, de los que uno tiene que parar a hacer la foto, sí o sí.
El primer cañón que nos encontramos es el del río Angorrilla, al cual iremos bajando de manera vertiginosa por una pista que en su momento tuvo que ser una vía importante de comunicación de la zona, pues posee en algunos puntos hasta antiguos quitamiedos.
Llegamos al punto más bajo del cañón, al lado del río, donde la sierra nos va a regalar más estampas impresionantes, siempre con el pico Almenaras al fondo, el punto de referencia de toda la ruta. Por cierto, al rodar por esta zona nos encontramos con un grupo de arrendajos, ese espectacular córvido de intensos colores azules, y como no, con su inseparable quejigo, que también hay unos cuantos por esta zona.
Por cierto, debéis saber que este tramo pertenece a la ruta de Santiago, en concreto el ramal que viene desde Lorca, y por cierto, está perfectamente señalizado.
Llegamos a Cortijo Turrero, el cual nos marca una nueva ascensión para salir de este cañón y tomar el del río Salobre. Subida por pista fácil y que tiene algunos tramos de buenos porcentajes, anunciando lo que nos queda desde este punto.
Bajada de nuevo vertiginosa hacia la carretera que une El Salobre con Riópar y que debemos tomar durante un par de kilómetros, hasta llegar a la aldea de Zapateros, punto en el que nos salimos de la carretera para tomar la pista que nos llevará hasta el pantano de Zapateros.
La aldea queda en un alto y desde luego, a tenor de lo que se ve, tiene que ser un sitio muy, pero que muy tranquilo, y dicho sea de paso, con unas vistas excepcionales.
El pantano de Zapateros es una obra reciente, y concentra las aguas de varios arroyos que allí se encuentran, con lo que no estamos hablando de una gran masa de agua; es un pantano pequeño y que se llena con dos tormentas y se vacía con tres días de calor...pero aún así, siempre merece la pena parar un rato...en nuestro caso para comer algo y recuperar fuerzas de cara al puerto final que vamos a acometer en breve.
Siguiendo hasta la cola del pantano encontramos la pista que nos llevará hasta el punto más alto de la ruta, nada menos que a 1500 metros. Esta es una subida más dura que las anteriores, sin duda alguna, y que se debe afrontar en compañía de Tole Tole y Chano Chano, esos incansables compañeros de viaje que hacen que las cuestas lo sean menos, porque hacen que uno suba a un ritmo bastante tranquilo.
Las vistas son excepcionales, mire uno hacia donde mire, y los picos van apareciendo poco a poco en el horizonte, claro está, ofreciéndose para la próxima ruta que vayamos a realizar por la zona. El Almenaras domina el panorama con sus 1785 metros, sin duda alguna, y es que es un pico muy especial y muy querido por todos los que nos gusta la sierra. No es el pico más alto de la provincia, pero eso da igual, es un monte especial, ya lo creo.
En esta ladera oeste, llama la atención la riqueza en cuanto los árboles que allí habitan, pues vamos a poder ver encinas, quejigos, arces, espino albar, varios tipos de pino y no sé cuantas especies más. Y con un poquito de suerte, cabras montesas, como así nos ocurrió a nosotros. Dicho sea de paso, subían mucho mejor que nosotros...je je je
En esta parte de la ruta vamos a comenzar a descender poco a poco, pues pasaremos algunos kilómetros rodando en esa cota de 1500 metros aproximadamente, hasta completar una pequeña ascensión para, ahora sí, empezar a descender hacia Vianos por la parte superior de un nuevo cañón, hasta llegar al cruce con la carretera que viene de Paterna hacia Vianos, y en la que por fin, vamos a poder descansar algo las piernas.
Poco más os puedo contar de la ruta, como siempre, aqui os dejo el enlace a todas las fotos y por supuesto la ruta, de unos 40 kilómetros con un acumulado de 1400 metros...ruta fácil de seguir y con algo de complicación en algunas cuestas por los porcentajes que se van acumulando en las piernas. De nuevo, darle las gracias al usuario de wikiloc "sunotisimo", pues la ruta está publicada por él en dicha página.