Buenos días.
Peñarrubia es un pequeño pueblo de la sierra del Segura, situado a caballo entre Elche de la Sierra y Yeste, a escasos kilómetros del río Segura, y desde el que podremos divisar Letur, encaramado en su gigantesca toba calcárea.
Este es uno de los ejemplos de la España “vaciada” pues en la actualidad tan sólo posee 58 habitantes censados, divididos en nada menos que cinco barrios: La Iglesia, La Rambla, La Venta, La Teja y Los Cuartos. Su medio de vida hasta la década de los 50 era (entre otros) el cultivo del esparto…desaparece el uso del esparto…desaparece el medio de vida…ergo, se vacía todo...para que nos hagamos una idea, la escuela tenía dos aulas en su momento, ahora está cerrada…no creo que haga falta explicar mucho más.
El símbolo del pueblo, sin duda alguna, es “La Piedra”, una impresionante muela de piedra que preside aquellos campos y que alberga en sus paredes y cuevas nada menos que restos de la época del bronce, de los íberos, y como no, de los romanos…
Y es que, en la parte superior de esa mole de piedra, encontramos un oppidum ibérico (recinto fortificado) que ocupa gran parte de la planicie que corona el monte, y que, a tenor de sus dimensiones pudo facilmente llegar a albergar una población de 1500-2000 almas (comparados con las 58 actuales, desde luego podemos asegurar que los tiempos han cambiado mucho).
En fin, que con estos mimbres, este pasado fin de semana el equipo terrestre de 40 rutas (o sea, mi mujer y yo), decidimos que ya era hora de visitar Peñarrubia, y de paso, darnos todo un homenaje culinario en la Posada de Peñarrubia, un muy buen restaurante totalmente recomendable (y en el que es mejor reservar con antelación).
La Ruta
Ya va para algunos años que el Ayuntamiento de Elche de la Sierra señalizó una serie de caminos con interesantes propuestas para recorrer unos cuantos rincones de aquellos montes, y precisamente uno de ellos es el que vamos a utilizar (tan sólo parcialmente), en concreto el trazado número 10, “Subida a la Piedra”.
Es una ruta fácil, vistosa, de las que hacen afición, ¡vaya! Partimos del barrio superior de Peñarrubia para encontrarnos rápidamente con las primeras cuestas…llevaremos un camino empedrado que según los estudios parece ser que es de origen romano, y que servía para la conexión con una pequeña explotación minera que queda unos centenares de metros más arriba.Aquí podremos ver pequeños cauces de agua, con varias balsas de agua cristalina y con un par de construcciones abandonadas. Rápidamente vamos ganando altura y pronto tendremos una impresionante vista sobre el pueblo y los campos que lo rodean.
Taffoni
La ruta es circular y muy fácil de seguir, pero en nuestro caso decidimos alterarla un poco-bastante, para poder acceder a la base de la peña y ver unos taffoni ( https://es.wikipedia.org/wiki/Taffoni) que allí se pueden casi tocar con la mano.
Para acceder a la base de la peña basta con tomar la ruta pero en sentido contrario en el punto de encuentro con una de las balsas (ver la ruta) y tras unos cientos de metros hacer algo de campo a través. Una vez visitada la base de la piedra decidimos que lo mejor era andar de nuevo campo a través, y así poder ver como se encuentra el bosque en esa zona…dado que es una umbría, la cantidad de especies vegetales que se pueden encontrar es tremenda. Eso sí, hay que andar como las cabras en muchas ocasiones, con lo que no es muy recomendable si no llevas buen calzado y tienes algo de miedo a las alturas.
La Piedra
En fin, que si sigues andando en dirección norte, vuelves a encontrar el camino que asciende, bien señalizado y que te lleva en un pis pas a la cima del monte.
No debemos pensar que vamos a encontrar una gran ciudad como en Castellar de Meca (https://40rutas.blogspot.com/2020/01/castellar-de-meca-un-poblado-iberico.html), o bastante restos como los de El Macalón (https://40rutas.blogspot.com/2017/10/nerpio-el-poblado-ibero-del-cerro-del.html) en Nerpio.
Lamentablemente aquel altiplano fue utilizado en su momento para el cultivo de cereales, con lo que fue aterrazado y gran parte de los restos fueron utilizados en los propios muros de las terrazas, tan sólo vamos a encontrar algunos restos de muralla, la base de unos tres edificios y un par de aljibes.Debemos fijarnos en este caso en la cantidad de cerámica que allí podemos encontrar, ibera y romana principalmente, aunque a poco que busquemos podremos encontrar piezas de muchos más orígenes. Además, entre los restos también podremos encontrar un gran número de escorias procedentes de fraguas, lo que nos habla de la importancia del lugar.
La historia
Y es que, son muchos los asentamientos íberos que podemos encontrar diseminados por nuestras sierras, y muy cercanas a este emplazamiento podemos destacar tanto el Macalón, en Nerpio, como el poblado de la Peña del Agua en Elche de la Sierra.
Por debajo de nuestrapeña discurría una ruta comercial de suma importancia, que unía el levante con Castulo. Dado que los romanos fueron los vencedores en las guerras púnicas, y estos pueblos fueron sus aliados en contra de los cartagineses, es fácil pensar que la conquista de estas tierras no fue cruenta, más bien una especie de absorción.
Por lo que estos emplazamientos simplemente desaparecieron con el tiempo, manteniendo seguramente posiciones muy próximas a la vía que partía hacia Castulo, pero con unas condiciones mucho más fáciles para la vida que las que podían tener el altiplano y seguramente alentadas por la propia Roma.
Donde comer o dormir
La Posada de Peñarrubia es un sitio ideal para hacer cualquiera de estas dos cosas. Desde luego en cuanto al restaurante es notable la cantidad de gente que por allí pasa todos los días, y no me puedo olvidar de los crujientes de alcachofa, y sobre todo, de una cazuela de ciervo en salsa…tierna, con sabor a campo…no puedo decir mucho más, es mejor probarlo…je je je
Las rutas
Y claro está, como el cartel lo teníamos a mano, no está de más poneros aquí el mapa con las rutas que han diseñado del el Ayuntamiento de Elche de la Sierra, que a mi parecer, son bastante completas y desde luego, para todos los gustos.
Aquí os dejo el enlace a todas las fotos, y como no, la ruta que hicimos, corta pero no tan fácil como en otras ocasiones:
Bueno, pues otra andarina a la saca y ya van unas cuantas, creo recordar. Desde luego, en cada una de las rutas a pie hay una superación diferente, no tanto por las zonas sino por agreste de determinados entornos, donde y por lo que veo en las fotos, no debe ser nada fácil andar.
ResponderEliminarComo siempre una imagen dice más que mil palabras..., fotos estupendas, donde se ve que te has detenido a tomar detalles de lo enfocado y fotografiado.
Mención especial, por supuesto, para María José, que a esta paso me la presentas en Tokyo, jajajaja. SALUDOS A LOS DOS.
Que sitio más espectacular, y siempre tan cerca de Albacete. Sólo espero que si alguien lee esto que se anime a visitarlo y así conocer algo más de los que tuvieron que ser nuestros tatara-tatara-tatara-tatara abuelos.
EliminarAunque también es bueno recordar que ahora ¡hace calor! cuidadín que si te pilla el lorenzo por el camino te vas a "jinchar de calor".
En fin, que ya tenemos preparadas unas cuantas rutas andarinas más, a ver si como bien dices, nos seleccionan para Tokio...ajajajaja
Un abrazo...Edu