Buenos días.
Otra ruta más que contar por la zona de Peñascosa, y en esta ocasión me quiero centrar en una curiosidad de la zona y que todavía podemos contemplar, una auténtica maravilla de la naturaleza pues se trata del Pino-Roble. Estos dos formidables árboles viven en una especie de simbiosis y es que, parece ser que en su momento el roble albergó la semilla del pino, esta nació dentro de él y poco a poco fue creciendo en el hueco central del roble, de modo que, después de pasar años y años podemos encontrarnos un árbol dentro de otro, viviendo en perfecta armonía. Aquí os dejo alguna foto de ambos y desde luego, si tenéis oportunidad y sois amantes de la naturaleza, no podéis dejar de visitarlos si pasáis por aquí.
Aunque esto parezca fácil, tiene una dificultad este camino y es que el ascenso a la cuerda siempre hay que hacerlo, y salen unos cuantos kilómetros de buen ascenso y en algunos momentos con unas rampas de porcentajes muy fuertes.
Una vez que llegué a la zona de arriba me dediqué a buscar el camino que mañana tomaría para llegar al arroyo de la fuente del roble, y vaya si lo encontré. Al llegar a su punto más alto hay unas vistas realmente bonitas de todos los montes que van quedando por abajo.
Desde aquí y viendo la hora que era, me dejé caer por el refugio del Lagarto y de nuevo tomé la senda del río Portelano par volver a tomar éste hasta llegar a un camino que une la cañada del portelano con la del río Cortes.
Poco más puedo contaros, tan sólo deciros que hice unos treinta kilómetros con unos 600 m+ de desnivel a una media de 13,4 km/h.
Os dejo un enlace a todas las fotos y como no, la ruta.
La ruta que pasa por el Pino-Roble...., pues ya hemos pasado una par de veces por ahí y he de decir que siempre se impone una foto para inmortalizar lo que a mucha gente le puede parecer poco más o menos que increíble. Pasar por esta zona y no hacer una foto es como cuando vamos a nuestro manido y consabido Hundimiento, y no nos paramos a hacer fotos.
ResponderEliminarPor lo demás, muy buena ruta de Peñascosa. Un saludo Edu.
Pues ya ves, es algo realmente raro esa mezcla de troncos y de copas, ¡como no parar! Hombre, si pasáremos por allí todos los días pues otro gallo cantaría, pero siendo un par de veces al año...je je je
EliminarAún me queda la crónica de la traca final, a ver si tengo tiempo y la subo, que me salió una de esas rutas de muchos metros para arriba...ja ja ja
Bueno amigo, que dentro de poco nos vemos.
Saludos...Edu