Bueno, pues vamos a por la segunda salida. Ayer ya conseguí hacer casi los 32 kilómetros y aunque las piernas, en principio, no parecía que se iban a resentir, lo cierto...., es que terminé con agujetas y no digamos de la zona del culete...., ja, ja, ja, ¡dos meses sin hacer callo en el sillín, son muchos meses!
Sin embargo, hoy tenía que salir nuevamente, tenía que ver cómo se comportaban las piernas y el trasero...., pues...., las piernas cansadas y el trasero dolorido..., hay que seguir intentar hacer callo, ja, ja, ja.
He salido solo hoy, a eso de las 07h.30'. Pedro Lara, creo que salía con flaca, Edu..., estaba fastidiado con la alergia (desde aquí te deseo que no sea nada) y el resto, pues supongo que cada uno habrá salido a su aire, aire que no es el mío, pues hasta que no tenga la forma física, no quiero penalizar a nadie en sus salidas.
He salido hacia la zona del parador y de aquí para la balsa que hay al lado de la autovía para llegar a la Fuente del Pozo de la Peña. Aquí parada obligada para beber un poco de agua.
La temperatura hoy, era perfecta, creo que unos 17º, si me apuráis, incluso hacía algo de fresco, pero a los pocos minutos, las piernas y el cuerpo entran en calor. Lo que si he notado es que el viento soplaba con una pizca de mala leche.
No obstante, lo peor no era el viento, era la sensación de pesadez en las piernas...., parece que no, pero estar sin darle al pedal casi dos meses, pasa factura, pierdes el ritmo y la forma física y lo que antes era casi un paseo, ahora se convierte en una ruta algo durilla. Supongo que es cuestión de coger el ritmo, con tranquilidad y sin agobios.
De aquí, me he decidido a seguir hacia delante, jugueteando con los caminos que me salían a izquierdas y derechas, intentando acordarme del camino más recto para llegar a la Estación de Chinchilla, por donde cae el Bar El Cuco y desde allí coger la vía del tren y seguir hasta El Polvorín, pero creo que al final me he emborrachado de caminos y he dado con mis huesos en la finca que hay al otro lado de la autovía, en la que está el molino de viento.
Desde esta finca se veía perfectamente el Castillo y los dos repetidores y ganas me han dado de subir a ellos, pero hoy no era el día.
Dado que el aire me apretaba y que notaba que las fuerzas, ni estaban para subir al Castillo y los repetidores y, ni mucho menos para llegar a El Polvorín, la decisión estaba clara......, he tirado para Chinchilla con la intención de dejarme caer a toda leche hacia Albacete por la vía de servicio, pero antes me he tomado otro momento de descanso en el Nazareno.
No obstante y aunque no quería subir por las calles de Chinchilla, la querencia ha podido más que la prudencia y algo he hecho, pero poco. He callejeado un poquito y cuando he visto que las calles se ponían muy empinadas he decidido, bajar hacia la vía de servicio.
Ahora sí, ahora tocaba ya ir hacia Albacete y cuando bajaba por la vía de servicio, he visto el coche de nuestro querido Juanma que le tocaba trabajar de mañanas en la Estación de Servicio, así que he parado para tener una charla con él. Un rato muy agradable, dónde hemos tocado el tema de las bicis dobles y la conveniencia de esta bicis cuando uno tiene problemas de espalda. Os dejo una foto de Juanma con su uniforme de faena, ja, ja, ja.
El resto os lo podéis imaginar, he bajado a 40 kms/hora a pesar de que soplaba el viento en contra. A las 10h.00' estaba ya en casa con otra ruta a las espaldas y con unos pocos kilómetros más que el día anterior. Ya me queda poco para llegar a El Polvorín.
Os dejo los datos técnicos de la ruta:
Tiempo efectivo de pedaleo, 02h.03'18"
Distancia recorrida, 40'870 Kms.
Velocidad Media, 19'90 Kms/hora
Velocidad Máxima Alcanzada, 44'7 Kms/hora.
Calorías quemadas, creo que algunas más que ayer, ja, ja, ja.